La higiene postural debe trabajarse desde el nacimiento del bebé. El desarrollo de la columna vertebral está directamente relacionado con sus posturas durante los primeros años de vida. Los primeros accesorios de transporte y de reposo de los bebés como son los capazos, los maxi-cosi, las hamacas, mochilas y demás utensilios en los que los niños pasan muchas horas deben permitir un correcto desarrollo de la musculatura y la evolución de las curvas fisiológicas de la columna vertebral.
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Consejos posturales
En las primeras semanas de vida, el bebé no debe dormir boca abajo ya que aumenta el riesgo de muerte súbita, pero sí debe mantener pequeños ratos esta postura para ayudar a la formación de la columna vertebral.
Es recomendable que se le realicen diferentes cambios posturales para que evitar deformaciones en el cráneo. En este momento el bebé está terminando de formarse y todavía sus huesos no tienen mucha consistencia.
Para ayudarles a coger fuerza en el cuello y que comiencen a sostenerlo es recomendable colocar al bebé sobre el pecho del padre o de la madre mirando hacia la cara. Es un ejercicio muy bueno y fomenta el apego emocional.