Cuando compramos una cuna para el bebé, lo primero que pensamos es en las sábanas, los arrullos y las mantitas que vamos a colocar dependiendo de la época del año. Sin embargo, un pequeño detalle que se escapa en los primeros momentos, sobre todo antes de que nazca el bebé, es el de la chichonera.
Las madres experimentadas suelen tenerlo en cuenta, pero las primerizas a veces se olvidan de este detalle. Es un complemento esencial para las cunas de bebé y que te ayudará a cuidar mejor a tu pequeño.
Evita los golpes
La chichonera no es más que un protector de tela acolchado que se coloca en la cuna. Habitualmente consta de tres partes que se colocan en la cabecera de la cuna y en los laterales superiores. La finalidad es que los bebés que se muevan mucho en la cuna no se den golpes con los barrotes o en el lateral. También evitan que el niño meta los pies o las manos entre los barrotes y pueda lesionarse, por lo que se convierte en uno de los complementos fundamentales para el cuidado de los más pequeños.
Decora la cuna
Las chichoneras son también muy útiles para decorar la habitación del bebé. Puedes usar colores intensos para estimular su percepción, o colores suaves y neutros si lo que buscas es que el bebé esté sereno, tranquilo y se duerma pronto. Hoy en día es posible encontrar chichoneras que combinan con juegos de cama, por lo que además de su utilidad, pueden servirte para decorar la habitación del pequeño y darle un toque mucho más personal.
Úsalas con seguridad
Es importante que las chichoneras queden bien sujetas a la cuna y no se caigan sobre el bebé. Para eso, los modelos suelen seguir unas normas de seguridad y están diseñados de manera que cuentan con agarres para fijarlas en la parte superior de la cuna. También hay que tener en cuenta que la chichonera sólo debe cubrir una parte de la cuna, y no todo el perímetro, porque disminuiría la ventilación de la misma. Además, nunca debes usar sustitutos de chichoneras como telas o cojines porque podrían caerse sobre el pequeño. Busca siempre modelos homologados y seguros o, si los haces a mano, ten en cuenta todos estos detalles para no correr riesgos.
Cuándo quitarlas
Se recomienda el uso de este complemento para bebés hasta los 8 meses aproximadamente. El motivo no es otro que la movilidad del pequeño: en esta época ya comienzan a estar erguidos y se agarran a los barrotes. Las chichoneras pueden ayudarles a intentar salir de la cuna o pueden enredarse en ellas, por lo que cuando el niño puede mantenerse agarrado a los barrotes es conveniente quitarla
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