Cuando tienes desplazarte en coche con tu bebé es muy importante cumplir con todas las normas de seguridad. No se trata de evitar multas, sino de proteger a tus seres más queridos. Los bebés y niños pequeños necesitan especial atención ya que son los más vulnerables y ante cualquier pequeño alcance pueden sufrir lesiones con mayor facilidad.
Es fundamental colocar correctamente los sistemas de retención infantil (SRI) a todas las edades. Atiende detenidamente a las instrucciones de anclaje que ofrece el manual del fabricante y si tienes alguna pregunta, no dudes en acudir a la tienda especializada donde lo compraste para que te resuelvan cualquier duda. El lugar ideal es el asiento central trasero y el peor (prohibido a niños menores de 135 cm) es el asiento del copiloto. Las indicaciones del nuevo Reglamento General de Circulación sobre la colocación de sillas de coches para bebés introducen algunos cambios con respecto a la normativa anterior, así que hay que seguir esta información al pie de la letra porque de estas medidas depende la vida de los más pequeños.
Desde 2013 los menores de 4 años (o hasta 18 kg) tienen que viajar con un sistema de retención infantil contrario a la marcha (siempre que el dispositivo cuente con dicha homologación). Ir sentado contra la marcha reduce el riesgo de lesiones graves en caso de accidente (el cuello del bebé es la parte más frágil) ya que la fuerza del impacto se reparte por todo el cuerpo. Viajar sentado contra la marcha puede evitar el 95% de las lesiones graves en caso de accidente. El nuevo reglamento también prohíbe a los que los menores cuya altura sea inferior a 135 cm viajen en el asiento delantero del coche, incluso si van sujetos a su silla adaptada.
En la siguiente tabla puedes ver los nuevos grupos de sillas de auto establecidos por la Dirección General de Tráfico. La guía fundamental para la correcta elección de la silla es el peso y la estatura, las edades son aproximadas. Todos los grupos entre 0 y 1 (ambos inclusive) tienen que viajar en sentido contrario a la marcha:
-Grupo 0 (hasta 10 kg, 1 año aproximadamente).
-Grupo 0+ (hasta 13 kg, 18 meses aproximadamente).
-Grupo 0+/1 (hasta 18 kg, entre 3-4 años).
-Grupo 1 (entre 9 – 18 kg, de 1 a 4 años)
Los grupos de niños más mayores también necesitan una seguridad adaptada a sus necesidades:
-Grupo 1-2 (entre 9 – 25kg, de 1 a 7 años).
-Grupo 1-2-3 (entre 9 – 36 kg, de 1 a 12 años).
-Grupo 2-3 (entre 15 – 36 kg, de 4 a 12 años).
Al margen de esta normativa, hay una serie de recomendaciones generales que los padres pueden poner en práctica para que los niños viajen más cómodamente.
Hay que mantener la temperatura del coche entre 19 y 24º y renovar el aire con frecuencia. Por la salud del bebé y por su comodidad, no se debe fumar dentro del coche y evitar en lo posible que el habitáculo vaya muy cargado para que el bebé disfrute del espacio. Una música tranquila y relajada (o incluso canciones infantiles que le gusten al bebé y en las que puedan participar los padres) es un plus para hacer que el trayecto se le haga más ameno. Si el viaje es largo, también es importante descansar cada 2 o 3 horas, tanto para que el conductor pueda mantener toda su atención en la carretera como para que el bebé se distraiga un poco. Algunos bebés se duermen en el coche, lo cual es una gran ventaja para su comodidad. Pero si no lo hacen, es importante respetar sus horarios y sobre todo evitar el viaje si se encuentra enfermo.