Los parques para bebés son un elemento clave para el entretenimiento y la educación de los más pequeños de la casa. A primera vista, los parques de juegos para bebés cuentan con varias ventajas obvias para todos: los niños se divierten jugando y los padres pueden realizar las tareas del hogar o descansar tranquilos porque saben que su bebé se encuentra en un espacio seguro y controlado con sus juguetes favoritos. Sólo hay que prestar atención a las horas de comida o dormir o si el pequeño empieza a protestar por alguna necesidad específica.
Los parques para bebés están diseñados precisamente con el fin de resultar muy seguros, pero hay que tener en cuenta que su objetivo es precisamente ese, el de ofrecer un espacio de relax para padres e hijos, pero no para que el bebé pase ahí todo el día.
Algunos parques de bebés son plegables y otros son rígidos, los hay de madera lijada, de plástico y otros materiales y cuentan con diversos tamaños. Algunos están indicados sólo para usar en interiores mientras que otros (los desmontables y modulares) se pueden utilizar tanto en interiores como en exteriores.
En cualquier caso, lo más importante para desarrollar la creatividad de los bebés es el juego. Un entorno de juego activo es vital para desarrollo de múltiples habilidades sociales y cognitivas en el futuro. Algunos de los mejores juguetes que el bebé puede meter en su parque no tienen por qué ser complejos dispositivos electrónicos. Juguetes clásicos como cubos con formas y colores, grandes coches de plástico, peluches, etc. son perfectos para potenciar la creatividad de los más pequeños.
Jugar hace a los niños más listos ya que a través de este método primario adquieren muchas habilidades básicas: con un vehículo de juguete aprenden cómo funcionan las ruedas, cómo se usan las carreteras, incluso cómo funciona la gravedad. Al tener distintos tipos de juguetes los bebés aprenden (aquí tiene mucha importancia la colaboración de los padres) colores, números, tamaños y formas. Así que asegúrate de que tu bebé tiene los suficientes muñecos, pelotas, coches etc. a su alcance para que pueda jugar (verificando siempre que no contengan piezas pequeñas y sean seguros para su edad, claro está).
Jugar también ayuda a desarrollar habilidades sociales. Colaborar, seguir normas, tomar turnos, etc. ayuda a los niños crear interacciones sociales que les ayudarán en sus futuras relaciones con otros individuos. Los niños que juegan bien juntos aprenderán a colaborar y trabajar bien juntos, así que si tu bebé tiene familiares o amigos de la misma edad, no dudes en buscar un parque de juegos amplio en el cual puedan jugar juntos.
Los juegos también ayudan a controlar a reducir el estrés. Puede que pienses que un bebé no tiene motivos para sentir estrés entre siestas, comidas y juegos libres, pero en verdad los bebés se enfrentan a situaciones de estrés cuando tienen que pasar algún rato solos o conocen a otros niños o adultos a los que ven por primera vez. Si cualquiera de estas situaciones puede provocar algún tipo de ansiedad en tu bebé, trata de anticiparte con juegos y entretenimientos para que las interacciones sociales le resulten más fáciles.
En las tiendas de bebés encontrarás una amplia variedad de parques de bebé que se adaptarán a las necesidades concretas de tu bebé y de tu hogar.